50º Aniversario de la muerte de Picasso

La Malagueta vive una jornada festiva

12 de marzo de 2023

Los niños fueron ayer los protagonistas en La Malagueta. Fue una jornada festiva y alegre. Diversión y aprendizaje del toreo de salón, el arte de poner banderillas, el rejoneo a caballo y concurso de pintura. Todo para conmemorar el 50 aniversario de la muerte de Picasso.

Una mañana de sábado extraordinaria en la que sólo molestó un poco el viento y en la que se echó de menos la presencia anunciada del gran maestro Eduardo Dávila Miura. En otra ocasión será, seguro.

Las puertas de La Malagueta permanecieron abiertas para todos de forma gratuita. Mamás y papás entraron y jugaron con sus hijos. Un niño corría con el carretón mientras otro se ponía de puntillas con semblante serio para clavar las banderillas. La pequeña Lucía asomaba detrás de un capote casi más grande que ella. Otro pequeño de 8 años aprendía a coger la muleta. Y muchos se esmeraron en pintar la mejor recreación de «El toro de Picasso».

Los turistas curiosos que se acercaron al coso malagueño también disfrutaron del espectáculo y tomaron algunas fotografías. Todo fue posible gracias al esfuerzo conjunto de la Diputación Provincial de Málaga y la empresa Lances de Futuro.

La jornada lúdica contó con una amplia representación taurina de profesionales y aficionados de Fuengirola. Allí vimos al gran maestro Jesús Márquez, que está hecho un chaval, dando lecciones y transmitiendo su saber.

El que fuera director de la Escuela de Tauromaquia de Málaga Fernando Cámara también estuvo presente contribuyendo a la causa. Y el matador de toros Francisco José Porras, que acudió con su hijo más pequeño, que también siente la afición. Antonio Pavón llevó a su torero Antoñín que es un ángel. Y el célebre pintor Juan Alberto Soler-Miret quedó asombrado de tantas dotes artísticas.

Rostros amigos que no quieren que el toreo desaparezca y que luchan por mantener este importante sector. Así lo destacó el diputado provincial de Cultura, Manuel López Mestanza, afirmando que el toreo «no es algo malo como muchos quieren hacer ver». Él agradeció al empresario taurino de La Malagueta, José María Garzón, esta iniciativa distinta «que va más allá» de los tradicionales festejos de la feria, manteniendo vivo el toreo todo el año y creando así más afición.

A José María Garzón se le vio trabajar y disfrutar del día. La satisfacción de lo bien hecho. Familia y cultura. El empresario se mostró además muy ilusionado con la próxima corrida Picassiana, el sábado 8 de abril con el cartel de Cayetano, Pablo Aguado y Juan Ortega. «Todo un acontecimiento para recordar en la ciudad», según dijo, porque además actuará la Orquesta Sinfónica de Málaga y la plaza contará con una decoración «muy» especial.

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